El fin de tu carrera en diseño (o no)
Hace unos días me topé con la siguiente frase de John Wooden, un jugador americano de basket que terminó siendo entrenador de varios equipos:
“Preocupáte más de tu carácter que no de tu reputación, porque tu carácter es lo que realmente eres, mientras que la reputación es únicamente lo que los demás piensan de tí”.
Y me dio bastante que pensar.
Cuando acabé de estudiar diseño hace unos 10 años (¡ouch!), pensé que ya lo tenía todo hecho. A partir de entonces lo que tenía que hacer era simplemente encontrar un empleo en el que poder demostrar todo lo que sabía y ya está.
Así que durante mis primeros años laborales trabajé en sitios porque me gustaba la empresa o lo que hacían, ya fuera una empresa de perfumes, una start-up que quería competir contra WhatsApp o proyectos que cogía como autónoma.
Y así pasaron algunos años en los que me centré mucho -demasiado- en trabajar y hacer lo que me pedían. Hasta que me di cuenta de que me estaba desactualizando.
Era justo la época en la que el digital explotó del todo, principalmente debido al crecimiento a lo bestia de las redes sociales y los teléfonos inteligentes, que obligaron a diseñar para muchas más pantallas y resoluciones y que, además, situaban al diseño digital en el centro de la estrategia de las empresas.
De repente aparecieron nuevos perfiles relacionados con el diseño que venían directamente de Estados Unidos, como UI Designer y UX Designer, y el/la diseñador/a ya no tenía que hacer “piezas sueltas”, sino que pensara mucho más allá de la propia estética.
Si un@ no se da cuenta de estos cambios a tiempo, corre el riesgo de morir profesionalmente: se produce un estancamiento y cada día que pasa es más complicado ponerse al día. No solo por las nuevas corrientes estéticas que aparecen, sino por las nuevas aplicaciones, software, metodologías, etc. que van apareciendo.
Volviendo a la frase que te citaba arriba, lo relacioné con la “profesión” y el “trabajo”. Creo que es importante diferenciar una cosa de la otra: el trabajo es donde invertimos determinadas horas a la semana para sacar adelante un proyecto que nos gusta, y la “profesión”, lo que realmente somos.
Con esto quiero decir que, aunque es importante trabajar en empresas que estén alineadas con nuestros propios valores, conviene no olvidarse de que nuestra profesión no está ligada a ese empleo.
Crecer profesionalmente no tiene por qué estar ligado al trabajo que realizamos en el día a día. Tiene que ser una decisión consciente que nos lleve a marcarnos un objetivo personal/profesional y trabajar para alcanzarlo.
Ya sea mejorar en X o Y técnica (aunque no se use en el empleo actual), aprender una nueva metodología o modificar un poco nuestro perfil profesional para acercarlo más a la analítica, a la investigación o hacia donde haga falta.
Y por si te lo estás preguntando…
…¿cómo se puede evitar morir profesionalmente?
Debes tomar conscientemente la decisión de querer avanzar en tu carrera y, después de marcarte un objetivo, empezar a tomar los pasos necesarios.
A veces puede ser un cambio de sector o de tipo de empresa, pero la gran mayoría de veces se trata de “reorientar” tu propio perfil profesional hacia otras disciplinas que consideras que son relevantes para ti.
Yo por ejemplo acabé diseño, pero después me embarqué a estudiar la carrera de Publicidad y RRPP con mención en dirección estratégica (porque quería conocer la parte de estrategia que está “por encima del diseño”) y, recientemente, un Máster en Aplicaciones Multimedia, que me ha dado perspectiva en gestión de equipos, analítica, SEO y me ha acercado un poco más a comprender el desarrollo de productos.
Puede sonar a mezcla de cosas, pero en realidad lo que hace todo esto es añadir a la base de diseño distintos complementos que, aunque no son mi especialidad, me ayudan a tener puntos de vista diferentes y a comprender el diseño desde muchísimos más ángulos.
Ahora que se han terminado las vacaciones, a muchos nos da por replantearnos cosas. Si estás en uno de estos momentos, te recomiendo que le eches un vistazo a los cursos de KSchool.
Como ya dije en un artículo anterior, di clase allí el año pasado y te puedo asegurar que cuidan mucho la planificación de sus cursos y hacen lo posible para que sean fáciles de compaginar si estás trabajando a jornada completa 🙂
Y no te preocupes, tienen tanto programas extensos (Másters), como cursos más breves, por si quieres “probar” si te gusta o no el CRO, la analítica, UI/UX, Big Data…
En cualquier caso, te recomiendo el Máster en el que di clase, en Experiencia de usuario, usabilidad y diseño de interfaces.
Y bueno, ya sabes que en uiFromMars tienes contenidos cada semana con los que continuar formándote 😉